" Del Gitano Jesus y sus manos"...
"Muchas mujeres deseaban al gitano. Mientras el golpeaba el cobre con su martillo, para convertirlo en ollas... Su cuerpo brillaba al sol, uno tras otro los golpes en el noble metal, hacían sudar el cuerpo, mientras las mujeres detrás de las carpas, entre las telas, lo miraban con deseo. Sus músculos se dibujaban en su piel, se endurecían, y las fragancias de sudor, el olor del tabaco que mordisqueaba entre sus labios y la noche de sexo salvaje, hacían que los cuerpos de las gitanas se agitaran al acercarse a él... éste alcanzaba sus narices y soñaban con que las poseyera. Noche a noche... esperaban ser las elegidas. Cuando descubrían que el gitano una vez más elegía a la misma, sus manos en las sombras buscaban sus pliegues, para satisfacer el deseo que las recogía... los gemidos de la gitana elegida... remecían los cuerpos de las demás mujeres del campamento. Al amanecer, los golpes del martillo, volvía a erizar la piel de las novatas, las que a escondidas, habrían las telas de