Dedos de porcelana...
" y cada vez que llegaba a su puerta, metía la llave y sin hacer ruido alguno, la quedaba mirando por el visillo... Sus piernas majestuosamente abiertas, y sus dedos envueltos en aceites haciéndola suspirar y gemir entre las sabanas... Menudo espectáculo regalaba. Sus dedos untados resbalaban entre las carnes con suavidad, parecían tejer luces en su cuerpo... su vientre bailaba mecido por los hábiles dedos que remecían en pequeños movimientos graciles su esencia... sus caderas se recogían hundiéndolos aún más en sus carnes para luego reflotar untado de crisálidas, que como telarañas quedaban prendidas a sus muslos... y todo iba a dar a su boca, que con gran esmero y disfrute eran absorbidos por sus labios sacando a chupadas el intenso sabor... Los gemidos ahogados y mordidos sobre las almohadas, rebotaban en el silencio mientras la angustia hacia que se apretaran sus muslos atrapando sus dedos presos en el sexo mojado que no dejaba de latir... finalmente su cuerpo dibujo la tensi...